La mayoría de las esterillas de yoga están hechas con plásticos derivados del petróleo y viajan miles de kilómetros antes de llegar a tu estudio, pero existe otra manera de hacer las cosas.
Cada año se fabrican millones de esterillas con materiales derivados del petróleo como PVC, TPE o EVA, que liberan toxinas y microplásticos. La mayoría se produce en Asia y recorre miles de kilómetros hasta llegar a Europa. En oléyoga elegimos hacer las cosas de otra forma.
Producción local con energía renovable
Producimos nuestras esterillas de manera local para eliminar el transporte transcontinental, reducir la huella de carbono y garantizar condiciones laborales justas. Desde 2022, la planta de producción cuenta con paneles solares fotovoltaicos que generan alrededor del 10 por ciento de la electricidad necesaria para la fabricación. Además, aproximadamente el 37 por ciento de toda la energía consumida procede de fuentes renovables certificadas. Esta combinación nos permite avanzar hacia un modelo energético más limpio y transparente mientras reducimos progresivamente la dependencia de los combustibles fósiles.
Materiales ecológicos y fabricación sin adhesivos
La superficie de nuestras esterillas está hecha de caucho natural de alta densidad que proporciona un agarre seguro incluso durante prácticas más intensas. El núcleo está elaborado con caucho reciclado para garantizar un uso responsable de las materias primas. Aplicamos una delgada capa intermedia de algodón orgánico para preservar la estructura de la esterilla sin utilizar pegamentos ni adhesivos químicos.
Durante la fabricación, fusionamos las capas de caucho aplicando calor en lugar de utilizar aglutinantes sintéticos para evitar compuestos químicos. Nuestras esterillas también son reversibles, lo que permite usar ambos lados y prolongar su vida útil, reduciendo la necesidad de comprar una nueva.
Uso responsable del agua
El agua es un recurso esencial. Por este motivo integramos sistemas propios de depuración en el proceso de producción, lo que nos permite tratar cerca del 80 por ciento del agua utilizada. Alrededor del 30 por ciento de esta agua depurada se reutiliza en la fabricación de las esterillas, reduciendo tanto el consumo de agua nueva como el impacto ambiental.
Economía circular y reducción de residuos
La gestión de residuos es otro pilar clave para reducir el impacto ambiental. El núcleo de nuestras esterillas incorpora caucho reciclado y estamos desarrollando un programa para recoger esterillas al final de su vida útil y reintegrar sus materiales en nuevos lotes de producción. Nuestra visión circular también se aplica al embalaje. Tanto las fundas como las cajas están hechas con papel kraft reciclado, evitando los plásticos de un solo uso.
Diseñadas para una mayor durabilidad
Prolongar la vida útil de cada esterilla es fundamental para reducir su huella ambiental. Por eso realizamos pruebas de compresión, absorción y abrasión en laboratorio para garantizar resistencia y durabilidad con el paso del tiempo. La superficie de caucho natural de célula cerrada evita la entrada de humedad y bacterias, facilita la limpieza y ayuda a mantener la esterilla en buen estado durante años.
Una esterilla que genera impacto
Sabemos que el yoga se basa en la coherencia entre cuerpo, mente y entorno. En oléyoga no solo diseñamos esterillas, diseñamos procesos de producción responsables. Plantamos un árbol por cada esterilla vendida, utilizamos energía renovable, fomentamos el reciclaje y hacemos un uso responsable de las materias primas. Practicar yoga no es solo cuestión de postura o respiración, también es una cuestión de coherencia con el mundo que habitamos.
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oléyoga es una marca de esterillas de yoga sostenibles hechas de caucho natural y libres de materiales plásticos. Diseñadas para ofrecer un gran agarre, durabilidad y un menor impacto ambiental, nuestras esterillas fomentan una práctica ética y consciente.
