¿Qué significa realmente "vivir el momento"? Esta frase, tan popular en la cultura contemporánea, tiene sus raíces en las enseñanzas milenarias de los Yoga Sutras de Patanjali. Sin embargo, su verdadero significado es mucho más profundo de lo que imaginamos porque… la expresión “vivir el momento” da por hecho que ya hemos desarrollado la capacidad para comprender y experimentar el presente. ¿Pero acaso es esta una capacidad innata?
.En los Yoga Sutras, Patanjali nos invita a reflexionar sobre el "ahora", considerándolo como parte de la eternidad. Y eso es mucho decir. Comprender y habitar el presente no es solo un desafío mental, sino una habilidad que requiere entrenamiento constante.
La mente, al igual que un río, fluye incesantemente entre pensamientos, recuerdos y proyecciones, sin detenerse jamás. Sin embargo, con práctica, podemos aprender a crear espacios de pausa, pequeños remansos de calma entre pensamientos. Es en estos intervalos donde se revela el verdadero significado del "ahora": un estado de presencia plena, libre del peso del pasado y la ansiedad por el futuro. Eso es, en esencia, lo que significa “vivir el momento” desde la perspectiva del yoga.
La mente, al igual que un río, fluye incesantemente entre pensamientos, recuerdos y proyecciones, sin detenerse jamás.
Entonces, ¿cómo podemos entrenar nuestra mente para cultivar esta presencia plena? El yoga ofrece herramientas prácticas y transformadoras: la meditación, el pranayama (control de la respiración) y la concentración. Estas prácticas nos enseñan a observar nuestros pensamientos sin juzgarlos, a regresar a nuestra respiración cuando la mente divaga, y a establecernos en el momento presente con claridad y ecuanimidad.
El yoga ofrece herramientas prácticas y transformadoras: la meditación, el pranayama (control de la respiración) y la concentració
En esencia, la capacidad de vivir el "ahora" no es un talento reservado a unos pocos, sino un arte que todos podemos aprender. Es una práctica consciente que, con el tiempo, puede transformar no solo nuestra percepción del tiempo, sino la manera en que vivimos nuestras vidas.